Gustavo de Arístegui y los musulmanes.

Gustavo de Arístegui, Diplomático y Diputado del PP, portavoz popular en la Comisión de Exteriores en el Congreso de los Diputados, contertulio habitual de Intereconomía TV (y otros medios "liberales"), azote del mundo árabe y musulmán, de la alianza de civilizaciones y de todo aquello que no sea la imposición del mundo occidental sobre el resto de las civilizaciones del mundo.

Pues ahora resulta que este ejemplar moderno del Cid Campeador se va a casar con una joven marroquí.
Si, has leído bien, marroquí.

Este fin de semana se ha celebrado la fiesta de compromiso en Rabat, aunque la boda civil será en octubre. Arístegui, divorciado, se ha comprometido con la señorita Nadia Jalfi, de nacionalidad marroquí, "profesional de la comunicación" y también divorciada. Según algunas fuentes tiene relación familiar con la casa real alauita, y según otras, sólo se trata de una relación de proximidad de su familia a dicha casa real.

Aunque las fuentes no informan acerca de si la novia es musulmana o no, el hecho de que la ceremonia sea civil tampoco nos lo aclara mucho. Lo cierto es que, de tratarse de una mujer musulmana, y siendo la boda en Marruecos, se debería aplicar la norma que le impediría contraer matrimonio con un hombre no musulmán, salvo que éste (aunque sólo fuera formalmente) hiciera profesión de fe musulmana; o que tuviera una dispensa directa del monarca alauita.

De modo que podemos pensar en varias posibilidades: por ejemplo, que la novia siendo marroquí no sea musulmana (posible, pero improbable); que la novia siendo musulmana no sea religiosa (en ese caso queda el pequeño formalismo legal); o que el Diputado Arístegui se convierta al Islam.

En cualquier caso, la papeleta es de cuidado, ¿dónde quedan sus anatemas al mundo árabe y musulmán?, ¿dónde sus críticas a la Alianza de Civilizaciones?, ¿dónde su mano dura con Marruecos?, ¿cuánto tardará el PP en liberarle de sus responsabilidades en el ámbito internacional?, ¿cuánto tardarán los medios "liberales" en prescindir de su colaboración?

¡ Ay Gustavo ! No se puede escupir al aire, porque corres el riesgo de que te caiga encima.

Eso si, les deseo a ambos toda la felicidad del mundo, y que juntos aprendan a comprender las diferencias y a disfrutarlas.